3 modalidades de trabajo que llegaron para quedarse.

La pandemia, la digitalización y la automatización revolucionaron el mercado de trabajo, tanto en la forma en que se trabaja como en las relaciones entre trabajadores y empleadores.

En nuestro artículo de la semana pasada, "Trabajo Remoto: la nueva forma de trabajar." te contábamos un poco sobre el trabajo remoto y algunas de sus ventajas tanto para empleadores como empleados. Hoy, queremos hablarte un poco más a profundidad sobre las tres modalidades de trabajo preferidas en este momento.

Actualmente, no es de extrañar que un gran número de personas trabajen de forma remota; de hecho, esta forma de trabajar representó la salvación para muchas empresas durante el periodo 2019 - 20221 debido a las grandes restricciones que impuso la pandemia por COVID-19 en ese momento; sin embargo, al finalizar la fase de confinamiento, tanto personas como empresas decidieron continuar con ese esquema que les aportó más beneficios de los que imaginaron en un principio.

Existen tres modalidades de trabajo a distancia utilizadas a día de hoy, cada una con sus características particulares las cuales responden a las necesidades de la industria o sector en cuestión. Las tres ofrecen mayor flexibilidad en el uso del tiempo de los colaboradores además de traer beneficios a las empresas como por ejemplo;

• Aumento de la productividad.
• Reducción de ausentismos.
• Retención y fidelización del personal, entre otros.

Modalidades de trabajo a distancia

1. Teletrabajo. Suele ser confundida con el trabajo remoto ya que se lleva a cabo de la misma forma; desde cualquier lugar con buena conexión a internet. A diferencia del trabajo remoto, el teletrabajo es una modalidad de trabajo menos flexible y con mayores requisitos y condiciones de implementación; por ejemplo, al teletrabajador ocasionalmente se le pide que asista a la oficina mientras que el trabajador remoto puede que nunca llegue a conocer a sus compañeros de trabajo en persona. El teletrabajo es una opción ideal para tareas o trabajos que requieren escritura, investigación, lectura, análisis de datos, trabajo informático, marketing, etc.
2. Trabajo remoto permanente. Es el modelo ideal para empresas que no contemplan la posibilidad de tener instalaciones físicas, bien sea porque sus empleados trabajan desde distintos lugares del mundo o simplemente porque no desean contar con una oficina. En esta modalidad es imprescindible contar con herramientas digitales y software de gestión que garanticen los flujos de trabajo, promuevan la comunicación constante y la consecución de los objetivos planteados.
3. Trabajo híbrido. En esta modalidad de trabajo existen políticas y acuerdos firmados por parte de la empresa y el trabajador que garantizan la igualdad de derechos y condiciones laborales. Acoge la modalidad de trabajo remoto y presencial. Aquí, las empresas cuentan con espacios físicos para actividades laborales, reuniones de equipo y con los clientes; bajo esta modalidad, los empleados pueden trabajar algunos días en la oficina y otros a distancia, sin embargo, esta agenda se encuentra definida y establecida por la empresa.

Trabajo presencial: el modelo que aún no abandona a las empresas

Así como hay muchas empresas que evolucionaron a estas nuevas modalidades de trabajo, existen muchas otras que no lo ven necesario, no es de su preferencia o sus actividades no lo permiten pero como todo, ofrece ventajas y desventajas que te mostramos a continuación:

Ventajas

• Facilita la comunicación. Al encontrarnos todos dentro de un mismo espacio físico, la comunicación es fluida y constante. A pesar de que existen muchas plataformas sumamente efectivas para la comunicación a distancia, hay ocasiones en que no todos los miembros del equipo están disponibles por distintos factores (fallas en la conexión a internet, etc.)
• Mejora los vínculos laborales. Otra de las ventajas del trabajo presencial es que fomenta la consolidación del equipo de trabajo. El contacto cara a cara alimenta positivamente los vínculos laborales; asimismo, el hecho de compartir un espacio físico y asistir a diario a la oficina promueve el sentimiento de pertenencia para con la empresa por parte de los colaboradores.

Desventajas

• Costos elevados. Tener a todo un equipo trabajando en una oficina implica incremento de costos para la empresa. El alquiler de un espacio, su mantenimiento, pago de servicios, así como la inversión en equipos y mobiliario, son gastos importantes que se pueden evitar trabajando con un equipo remoto.
• Aumento de distracciones. Si bien es cierto que el trabajo presencial fomenta y mejora los vínculos laborales, tambien es cierto que se presta para momentos de distracción. Ir por un café, entablar largas conversaciones o volver más tarde de almorzar pueden transformarse en situaciones que le restan productividad al equipo.

Actualmente, las organizaciones están redefiniendo la productividad y el presencialismo está agotándose mientras que los modelos de teletrabajo y trabajo remoto ganan terreno. Este avance natural hacia un sistema optimizado para el desarrollo de nuestra actividad profesional requiere de herramientas tecnológicas adecuadas que te ayuden a gestionar los flujos de trabajo y las personas que los llevan a cabo.

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