Contratos Inteligentes: ¿Qué son y qué ofrecen?

A través de un contrato inteligente, las acciones pueden autoejecutarse según una serie de parámetros ya programados. Todo ello de forma inmutable, transparente y completamente segura.

Hoy en día, hay muchos términos nuevos que debemos entender si queremos avanzar. Desde que nació Bitcoin y el lanzamiento de su primera versión en 2009, han sido muchos los proyectos interesantes que han ido apareciendo, aportando nuevas ideas y soluciones descentralizadas a muchos de los procesos o aplicaciones centralizados que todos usamos hoy en día. En ese caso, déjanos preguntarte: ¿te suenan familiares los contratos inteligentes? - Hoy estaremos hablando de ellos, qué son y qué pueden ofrecer.

De acuerdo a IBM, los contratos inteligentes son simplemente programas almacenados en una cadena de bloques que se ejecutan cuando se cumplen condiciones predeterminadas. Por lo general, se utilizan para automatizar la ejecución de un acuerdo para que todos los participantes puedan estar seguros de inmediato del resultado, sin la participación de ningún intermediario ni pérdida de tiempo. También pueden automatizar un flujo de trabajo, activando la próxima acción cuando se cumplan las condiciones. ¿Pero, como funcionan?

Entendemos por "contratos" los acuerdos verbales o escritos. Estos documentos, normalmente se refieren a leyes y jurisdicciones territoriales, y en ocasiones requieren notarios. Es decir, más costos, tiempo y terceros involucrados en el proceso. Por otro lado, un contrato inteligente es capaz de ejecutarse y hacerse cumplir, de forma autónoma y automática, sin intermediarios ni mediadores. Evitan la interpretación al no ser verbales ni escritos en los idiomas que hablamos.

Los contratos inteligentes son "scripts" (códigos de computadora) escritos con lenguajes de programación. Esto significa que los términos del contrato son puras declaraciones y mandatos en el código que lo forma.

Un contrato inteligente puede ser creado y convocado por personas físicas y/o jurídicas. Pero también por máquinas u otros programas que funcionan de forma autónoma. Es válido sin depender de autoridades. Esto se debe a su naturaleza: es un código visible para todos y no se puede cambiar, ya que existe dentro de la tecnología Blockchain. Esto le da un carácter descentralizado, inmutable y transparente.

Dentro de un contrato inteligente, puede haber tantas estipulaciones como sea necesario para satisfacer a los participantes de que la tarea se completará satisfactoriamente. Para establecer los términos, los participantes deben determinar cómo se representan las transacciones y sus datos en la cadena de bloques, acordar las reglas que rigen esas transacciones, explorar todas las posibles excepciones y definir un marco para resolver disputas.

Luego, un desarrollador puede programar el contrato inteligente, aunque cada vez más, las organizaciones que usan Blockchain para negocios proporcionan plantillas, interfaces web y otras herramientas en línea para simplificar la estructuración de contratos inteligentes. Pero, ¿Cuáles son los beneficios de contar con contratos inteligentes?

5 Beneficios de los Contratos Inteligentes

• Actualizaciones en tiempo real. La naturaleza tecnológica del propio contrato inteligente hace que la velocidad de los procesos comerciales aumente considerablemente.
• Menor riesgo de ejecución. El proceso de ejecución es inmutable y descentralizado, por lo que NO existe riesgo de manipulación, incumplimiento o error en la gestión de dicho contrato.
• Mayor precisión. La automatización del sistema no solo aporta rapidez sino también mayor fiabilidad. No se producen errores en la transacción.
• Menos intermediarios. Este tipo de contrato elimina directamente la intervención de terceros como bancos o notarios que dan fe y confianza a dicho contrato.
• Costo más bajo. Al no haber intermediarios para verificar o realizar el contrato, los costes de transacción se reducen automáticamente. En definitiva, los Smart Contracts son una consecuencia del Blockchain del que tanto os he hablado últimamente. Consiste en un cambio de mentalidad que pretende cambiar el mundo de las transacciones entre particulares y empresas.

Algunos de los trámites que se pueden realizar mediante contratos inteligentes son: transacciones financieras, gestión de derechos de autor, sistemas de pago, transferencias de derechos y obligaciones, automatización de herencias y donaciones, logística, entre otros.

Gracias a que se trata de un proceso automático y en el que no se vulneraría la privacidad de los intervinientes en el acuerdo, le confiere un carácter novedoso ya la vez muy atractivo para todas aquellas transacciones contractuales que ejecutamos en nuestras vidas.

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